CONTROL DE ENFERMEDADES CRÓNICAS: VIVIR MEJOR ES POSIBLE

Introducción
Las enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) como la diabetes, la hipertensión, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), el asma y las enfermedades cardiovasculares son responsables de más del 70% de las muertes en el mundo. A diferencia de enfermedades agudas, las crónicas son de larga duración y progresan lentamente, pero pueden controlarse eficazmente con tratamiento oportuno, educación y cambios en el estilo de vida.
¿Qué son las enfermedades crónicas?
Son afecciones de salud que:
- Son persistentes (duran más de 3 meses).
- No se transmiten de persona a persona.
- Requieren tratamiento continuo.
- Pueden generar discapacidad si no se controlan.
Las más comunes incluyen:
- Diabetes mellitus tipo 2
- Hipertensión arterial
- Enfermedades cardíacas
- EPOC y asma
- Enfermedad renal crónica
- Artritis reumatoide
Importancia del control
El adecuado manejo de estas condiciones evita:
- Complicaciones graves como infartos, accidentes cerebrovasculares, amputaciones o insuficiencia renal.
- Hospitalizaciones frecuentes.
- Disminución en la calidad de vida.
- Muerte prematura.
Claves para el control de enfermedades crónicas
- Adherencia al tratamiento médico
- Tomar los medicamentos prescritos sin faltar ni automedicarse.
- No suspender el tratamiento sin orientación médica.
- Asistir a controles periódicos para ajustes de dosis o exámenes de seguimiento.
- Monitoreo constante
- Controlar regularmente la presión arterial, el nivel de azúcar en sangre, el colesterol, el peso, entre otros parámetros.
- Usar dispositivos como tensiómetros o glucómetros en casa.
- Alimentación saludable
- Reducir el consumo de sal, grasas saturadas, azúcares y alimentos ultraprocesados.
- Aumentar frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y agua.
- Seguir planes alimenticios personalizados con nutricionistas si es necesario.
- Actividad física regular
- Ejercicio al menos 30 minutos al día, 5 días por semana.
- Adaptado a la condición física y con autorización médica.
- Mejora la circulación, regula el azúcar, fortalece el corazón y disminuye el estrés.
- Evitar hábitos nocivos
- No fumar ni consumir alcohol en exceso.
- Dormir entre 7 y 9 horas al día.
- Manejar el estrés con técnicas de relajación, apoyo emocional y terapia si es necesario.
Rol de las droguerías en el manejo de enfermedades crónicas
- Seguimiento farmacológico: ayudar a los pacientes a tomar correctamente sus medicamentos.
- Educación: sobre el uso de inhaladores, glucómetros, tensiómetros y otros dispositivos médicos.
- Suministro confiable: de medicamentos, vitaminas y productos especiales.
- Orientación: sobre signos de alarma y cuándo acudir al médico.
- Apoyo emocional: consejería básica y derivación a servicios médicos.
Signos de alarma que requieren atención médica urgente
- Dolor en el pecho o dificultad para respirar.
- Mareos frecuentes o pérdida de conciencia.
- Visión borrosa, entumecimiento en extremidades o alteraciones del habla.
- Heridas que no cicatrizan (especialmente en personas con diabetes).
- Cambios súbitos en el comportamiento o estado de ánimo.
Conclusión
Aunque las enfermedades crónicas no se curan, sí se pueden controlar eficazmente, permitiendo una vida activa, productiva y feliz. La clave está en la constancia, el compromiso con el autocuidado y el acceso a una red de apoyo que incluya médicos, familiares y servicios cercanos como las droguerías.
Referencias bibliográficas
- Organización Mundial de la Salud (OMS). (2023). Enfermedades no transmisibles.
- CDC (2023). Chronic Disease Prevention.
- Ministerio de Salud de Colombia (2022). Rutas de atención para enfermedades crónicas.
- Fundación Interamericana del Corazón. (2022). Prevención y control de enfermedades crónicas.
- American Diabetes Association (ADA). (2023). Living with diabetes.